Si amplias el mapa, verás que en el centro está Innsbruck, y a su alrededor mirando hacia todas partes, un montón de estaciones. Más de 30 areas esquiables se han unido entorno a 9 estaciones de esquí para todo tipo de esquiador. El experto y exigente tendrá la Nordkette. Las familias pueden elegir Muteralm. Si sois muchos, sin duda Kühtai. Para una esquiada romántica entre árboles, Schlick 2000. Pero algo que si debe ser común para todos, es que si vas a Innsbruck una semana, tienes que verte varias estaciones de esquí.
Y es que Innsbruck se ha convertido, sino en la mejor, en una de las mejores poblaciones de Europa para pegarse una buena semana de esquí sin repetir estación, pudiendo combinar las vacaciones con visitas culturales y paseos por las calles de esta ciudad austriaca.
Porque además no necesitas el coche para moverte o ir a las estaciones. Cuando llegues al hotel solo tienes que pedir la Welcome Card (gratis) que te da derecho a subirte gratuitamente en el bus que va a las estaciones, y volver por la tarde también sin coste alguno. Además con esta tarjeta tienes descuentos en distintas actividades e instalaciones como piscinas (-50%), un rocódromo cubierto (-10%) o en algunos museos, así como poder usar las huellas de los centros de esquí de fondo si algún día te apetece hacer algo distinto. Y este pase es totalmente gratuito!.
Con tu Welcome Card en la mano, solo hay que pensar adonde ir cada mañana a esquiar. La primera estación que casi todo el mundo escoge es la de la Nordkette. Y es que se puede tomar un funicular desde el mismo centro del pueblo, que te deja en 30 minutos en pistas. Es la más apreciada por los buenos esquiadores, sobre todo cuando le pega el "nordstau" que aquí llamaríamos una 'nortada'. Es decir, que la estación recibe un buen paquetón de nieve polvo, entorno a un 20 o un 30% más que el resto por su orientación y situación en el mapa.
Ruta imprescindible para el que vaya, comenzar arriba del todo en Hafelekar (2256 m), bajar por la Seilbahnrinne mientras el corazón te bombea a 1.000 por hora, y acabar tranquilamente entre los árboles de Hungerburg a 860 metros. Todos repiten!.
Mutterer Alm está a unos 20 minutos en el bus gratuito, y es más ideal para las familias. Hay dos pistas muy largas a las que se accede por dos telesillas también igualmente largos. El desnivel acumulado es de unos 1.000 metros, pero es ideal para los más peques o los y las debutantes.
Lo mejor es, ir mirando estaciones antes de ir, e ir visitando una cada día. Una te gustará más, y otras te encantarán. Pero teniendo la oportunidad de ir con el bus gratuito, no se puede perder la oportunidad de hacer base en Innsbruck para ir viendo otros complejos invernales.
Otra de las ventajas importantes de Innsbruck es que tienes a mano una enorme riqueza cultural y de ocio. Esto es algo más difícil de encontrar en Europa, pero que cada vez se pide más. Los esquiadores ya no buscan solo esquí, sino también poder hacer visitas culturales por la tarde o dar paseos por las calles de la población, sin que tengan que ser las mismas cada dia.
Según los días que vayas a estar, quizás te pueda interesar hacerte con este pase. Sirve para las 9 estaciones de esquí que rodean Innsbruck.
Innsbruck es el lugar lógico para alojarse si se utiliza este pase de hasta 7 días, para probar lo que te puede ofrecer cada estación. Combinado con el estilo cosmopolita de Innsbruck es ideal para unas vacaciones de invierno únicas.
La estación que nadie debe perderse es Nordkette por sus pistas de esquí con vistas directamente al centro de la ciudad de Innsbruck y un par de clásicas pistas negras donde probar tu valía . Además aquñi se han organizado los Juegos de 1964 o 1976, así como los recientes Juegos Olímpicos de la Juventud de 2012.
- ¿Cuanto cuesta? 253.50 EUR (pase de 7 días)
- ¿Qué estaciones? Nordkette / Seegrube, Patcherkofel, Axamer Lizum, Muttereralm, Kühtai, Rangger Köpfl, Glungezer, Schlick 2000 y el glaciar de Stubai. 90 remontes y 300 km de pistas en 9 zonas de esquí.
La excursión a Rinner Alm es algo más exigente y larga. Hay que calcular una hora de camino a pie y con niños, algo más. El camino lleva desde la localidad de Rinn, a este refugio auténtico construido en 1927 a 1.400 metros de altitud. Aquí podremos alquilar un trineo para usarlo con iluminación nocturna los martes, viernes y sábado de 19h a 23h. Y siempre hay nieve porque por si acaso, tienen cañones de nieve.
Hay excursiones que tienen el punto de salida en el centro de la ciudad y que llegan al refugio Umbrüggler Alm o al refugio Arzler Alm. Después de la subida con el funicular Hungerburgbahn queda un corto tramo de ascenso a pie antes de llegar a ambos refugios y disfrutar de sus excelentes ofertas gastronómicas y grandes vistas.
Una excursión algo distinta se hace en compañía de animales, por ejemplo, en la localidad de Obsteig, en el altiplano de Mieming. Todos los viernes la granja Aschlandhof organiza visitas guiadas con lamas para familias. A los niños les encantan estos tranquilos animales y la excursión se convierte en toda una aventura para ellos.
Con la tarjeta Welcome Card, los visitantes de la región Innsbruck tienen acceso gratuito a todas las pistas de esquí de fondo de la región olímpica de Seefeld. Las pistas de esquí de fondo de Kühtai, situadas a 2.000 metros de altitud, y las pistas de Lüsens y Praxmar en el valle Sellraintal, ofrecen excelentes condiciones de nieve para esquiadores nórdicos de todos los niveles y modalidades Todas las pistas de esquí de fondo están a una media hora en bus de Innsbruck.
El 5*-Alpenresort Schwarz en Mieming es uno de los hoteles wellness más exclusivos del país, con nueve piscinas al aire libre y cubiertas, numerosos tratamientos de spa y un gran espacio de sauna no deja nada que desear.
El Biowellnesshotel Holzeiten en Obsteig ofrece un ambiente muy acogedor en un entorno que combina a la perfección el diseño moderno con elementos naturales.
El Mooshaus en Kühtai recibe este invierno a sus clientes con una piscina más que espectacular: el nuevo Endless Sky Pool a 2.050 metros de altitud es el Infinity-Pool más alto de todo los Alpes. Las vistas hay que verlas para creérselas.
El hotel Grauer Bär del centro de Innsbruck ofrece una experiencia única en un ambiente que combina sensaciones alpinas con sensaciones urbanas. El whirlpool exterior y la piscina cubierta panorámica permiten a la vez nadar y disfrutar unas vistas privilegiadas sobre los tejados de Innsbruck y las montañas que rodean la ciudad.
Siguiendo en la altstadt, caminando por la avenida Maria-Theresien-Strasse, llegamos a la Herzog-Friedrich-Strasse, que atraviesa el centro histórico, y pasando por el antiguo ayuntamiento, Altes Rathaus, con la Stadtturm, encontramos la torre de la ciudad (antigua torre de vigilancia y hoy mirador) hasta llegar al famosísimo tejadillo de oro.
El tejadillo de oro (Goldenes Dachl) es el icono por excelencia de Innsbruck. Cubre un balcón en la Neuer Hof, un palacio del siglo XV, y fue mandado construir por el emperador Maxilimiano I en el año 1500 con 2.657 tejas de cobre (cada una tiene un coste actual de unos 1.500 euros) doradas a fuego que por su color, asemeja al oro, y por eso su nombre. Fue encargada precisamente para acallar los problemas económicos de la época.
Otros lugares a visitar son:
- La Hofkirche: iglesia que guarda el monumento fúnebre del emperador Maximiliano I, y conocida también como "Iglesia de los hombres negros” por las 28 estatuas que guardan el lugar.
- El castillo de Schloss Ambras, al sur de Innsbruck y otro de los iconos de la ciudad.
- El trampolín de saltos de esquí de Bergisel, obra de la arquitecta iraqui Zaza Hadid, quien también se encargó del diseño de las estaciones del funicular que sube a la Nordkette.