Y antes de que vengáis a decirlo vosotros: Mira mamá! Sin dientes!!
Sé que por aquí hay gente muy en contra de las cámaras, pero este post va dedicado a los que nos gusta grabar y esquiar a partes iguales. Bueno y también va dedicado a la señora que me dijo que llevar la cámara en el casco era muy peligroso para acto seguido bajar derrapando por un trazado de competición, casi cayéndose en cada curva y llegando abajo de milagro tras hacer algo para lo que claramente no estaba preparada.
Desde que empecé a usar las cámaras 360 me quedé flipado con los resultados. El palo selfie invisible sin necesidad de editar nada me impactó muchísimo, pero hay que reconocer que esquiar con el bastón en mano y el palo selfie es complicado y requiere cierta fuerza y habilidad en las manos que no todo el mundo tiene.
Así que aquí tenéis la solución: the back bar. Este arnés o cinturón con un tornillo de trípode para el palo selfie es el complemento ideal para cualquier cámara 360. Podéis grabaros sin necesidad de sujetar la cámara y conseguir imágenes casi imposibles de otra manera.
Podéis comprarlo en este enlace.