Sölden alza el telón, empieza la fiebre
Una victoria en la prueba inaugural de la AUDI FIS Ski World Cup es simplemente el primer paso de una temporada que llevará a los esquiadores a través de 14 países, 34 estaciones diferentes y 37 carreras que se disputarán a lo largo de la temporada. Estos días los turistas en Sölden quedan a veces atónitos, "¿Puede ser que el que va sentado con nosotros en la silla sea el campeón olímpico Benni Raich?", pues si, de hecho no es que pueda ser, es que es lo más normal, incluso en los días de carreras puedes coincidir con los esquiadores y esquiadoras de más renombre del circuito compartiendo silla con ellos y en la mayoría de casos incluso algunas palabras. En Sölden estos días se ha podido ver a Maria Riesch relajándose al sol en la terraza de un bar, al noruego Aksel Lund Svindal siempre dispuesto para una broma, ver a Didier Cuche comentando la jugada con los responsables del pisado de las pistas o a una de las estrellas más rutilantes del circuito como Bode Miller posando para las fotos con los fans.
Ahora mismo el Sölden presenta un curioso aspecto con alguna pista llena de banderas de colores que le dan el aspecto de un cuadro lleno de color. Hay veces que uno se pregunta cómo lo hacen para encontrar "su" pista entre esa maraña de banderas. La familia del esquí se reúne como cada año en Sölden para esta especial cita, de entrada las fiestas, las presentaciones, las ruedas de prensa ... pero a partir del sábado esto queda aparcado, la cosa se pone seria, de hecho para algunos incluso antes, por ejemplo el equipo austriaco tiene que elegir a 4 corredores de entre los 10 preseleccionados así que para ellos la fiesta probablemente acabe antes de empezar, es una oportunidad único ante un evento que en Austria es de alcance e interés nacional.
Todos coinciden: La primera es muy importante
A estas alturas todo el mundo apura sus quinielas sobre el estado de forma en el que llega todo el mundo a la Copa del Mundo, hay dudas tras lesiones, como puede ser el caso de Lara Gut o el de nuestras queridas María José y Carolina, incertidumbre sobre estados de forma, rivalidades que pueden cambiar de triunfador, como el caso de las amiguísimas Vonn y Riesch, muchas luces que tienen que empezar a salir de entre las sombras. Eso si, si hay algún punto en el que todo el mundo coincide es que la primera carrera de la temporada es muy importante, no decide absolutamente nada, de hecho Vonn no ha conseguido nunca grandes resultados en Sölden y todos sabemos como han acabado las dos últimas temporadas, pero no son los resultados sino más bien las sensaciones las que marcan la importancia de estas dos carreras. Estas carreras sirven para ver en qué punto te encuentras de tu preparación, y eso es algo que no se hace sólo contra el crono sino corriendo contra tus rivales, tras Sölden hay margen para intentar recuperar alguna décima perdida que en los entrenos pudiese haber pasado desapercibida, tras Levi no hay marcha atrás y lo hecho hecho está así como lo que falte por hacer quedará casi seguro sin hacer, no hay tiempo puesto que las carreras se suceden ya una tras otra sin mucho margen, así lo señala por ejemplo Rainer Gstrein, entrenador de la ÖSV y director de carrera en Sölden: "Sölden es importante, si estás por debajo de tu nivel standard te preguntarás donde has perdido tiempo durante 3 o 4 semanas. Más entrados en el invierno las carreras se suceden una tras otra en pocos días.".
Otro punto importante de Sölden es que es una de las pocas oportunidades de ver juntos a las corredoras y corredores de la Copa del Mundo, sólo coinciden aparte de en el glaciar tirolés en Levi, Val d'Isere, Munich, Zagreb (Aunque a decir verdad más bien poquito) y las finales, y este año en los mundiales.
Accesible para los espectadores
Acudir a las pruebas de Sölden es cómodo y muy accesible para los espectadores, a través de la más alta carretera panorámica de Europa que desemboca a los pies del Rettenbach Gletscher los fans puede acceder a los aparcamientos del glaciar en coche particular o bus desde el pueblo (La entrada incluye el transporte gratuito en bus), aunque si vuestra intención es esquiar aparte de disfrutar de la carrera os recomiendo que dejéis vuestro vehículo a los pies del Tieffenbach donde se accede girando a la izquierda a la entrada del aparcamiento del Rettenbach y os acerquéis al estadio esquiando, los aparcamientos se ponen a tope y o acudís realmente pronto (Pronto quiere decir estar en el glaciar sobre las 7 de la mañana el sábado o aparcaréis muy lejos del estadio, el domingo ... a lo mejor ni eso). Otro dato interesante es que desde el estadio se puede ver perfectamente la carrera desde que los esquiadores abandonan el falso llano inicial y se lanzan a tumba abierta sobre el famoso muro de Sölden. Otro punto a tener en cuenta es que compartir vuestra pasión con otros 20.000 espectadores es algo que se puede ver y vivir en pocas pruebas de la Copa del Mundo, hay otras con más tradición o solera que esta pero si como al que os escribe no os gustan las aglomeraciones exageradas os recomiendo esta prueba y además es un buen momento para estrenar la temporada. También recordar que el glaciar tiene un peaje de entrada que con vuestro forfait es gratuito, o está incluido si se prefiere decir así, y que el forfait obviamente os permite visualizar todo el recorrido
Un año más los fanclubs tendrán un papel especial en la prueba, un total de 36 (¡¡Sumando unas 2.000 personas!!) se han inscrito ya para la fan-parade que tendrán lugar el sábado 23 y donde se repartirán algo más de 2.000 euros en premios, un premio que puede ayudar a sufragarse los gastos del viaje hasta allí. Aparte de esto la animación estará presente durante todo el fin de semana con todo tipo de actos como conciertos, fiestas o una "Oktoberfest" en el pueblo de Sölden.