Podrian buscarse muchos apelativos a la situación en que se vieron varios esquiadores este fin de semana en Beech Mountain , pero estamos de acuerdo en que quedarse atascado en un telesilla a temperaturas de invierno mientras una enorme fuente de agua desncontrolada te deja empapado, solo tiene un calificativo: una putada (mal sonante, pero recogido por la RAE).
El pasado viernes 7 de enero se rompió una de las tuberías de agua del sistema de nieve artificial de la estación de esquí de Beech Mountain Resort (en Carolina del Norte, Estados Unidos) . La fuerza del lìquido provocó un boquete, justo debajo de la linea del telesilla.
La violencia del agua provocó el balanceo de las sillas, de manera que en alguna ocasión el remonte se paraba. A más de un pasajero le pilló justo encima del escape. Los hay que esperaron pacientemente a que se pusiera de nuevo en marcha el aparato, y quien, según parece, optó por saltar al suelo o acabaron cayendo por la situación.
La estación emitió un comunicado de disculpa:
"El viernes 7 de enero, un huésped tropezó con una de las bocas de agua y aire mientras se hacían operaciones de fabricación de nieve. El hidrante estaba debajo de una silla ocupada, lo que provocó que varios clientes se mojaran. Nuestro equipo de operaciones y seguridad trabajó diligentemente para descargar el remontes y drenar el sistema de manera segura. Avery EMS transportó a dos clientes a un hospital local con lesiones que no amenazaban su vida. Creemos que todos están bien fuera de la desafortunada situación, y las operaciones se realizan en un horario regular".