La semana pasada hablábamos de la amortiguación. Para
bajar a saco hay que haber desarrollado muy bien estos mecanismos o al tercer
bache iremos volando y difícilmente mantendremos el control. Pero la
amortiguación es algo muy complejo y cuando uno va muy rápido no tiene mucho
tiempo de pensar; por eso, en los baches, para no olvidarnos de estirar las
piernas, un truco fantástico es concentrarse en esquiar bien alto - de
pie - lo que facilitará enormemente que absorbamos bien.
Hable uno con un entrenador de
baches francés, americano, sueco o suizo todos coincidirán en lo mismo: en los
baches, cuanto más alto se esquíe, - cuanto más de pie - mejor. Esto
tiene varias explicaciones. La primera, la mas obvia, es que cuanto más de pie
vayamos más recorrido tenderemos en los amortiguadores para absorber. La
segunda es que gracias a eso, si nos empeñamos en seguir de pie tras cada
absorción siempre mantendremos el contacto con la nieve, es decir, no sólo
amortiguaremos mejor, sino que por llevar los esquís pegados al suelo podremos
controlar mejor el vehículo.
Pero hay una tercera razón que es casi la más
importante, y es que cuando más de pie vayamos más centrados esquiaremos.
Y eso ¿por qué? Sencillamente porque el cuerpo está diseñado así para
caminar o mantener la posición bípeda, y las masas están distribuidas de tal
manera que cuando uno se pone de pie tiende a irse hacia delante.
Comprobar esto es muy sencillo: cuando uno se agacha tiende a irse para atrás
y, en cuanto se pone de pie, la masa del cuerpo se desplaza hacia delante. Como
esquiando y, sobretodo, bajando baches, la tendencia es quedarse retrasado, cada
vez que estiremos las piernas y tratemos de ponernos bien de pie, nos
recuperaremos de la posición, pues nuestro cuerpo se adelantará. En conclusión,
si uno siempre empieza un carril de baches con la determinación de ir bien de
pie, se retrasará menos y tendrá la mitad del trabajo hecho.
La actitud, por tanto, del que
comienza un carril de baches debe ser muy arriba y con mucha anticipación
en los brazos. Si comenzamos así es posible que descubramos que todo es más fácil,
pues cuanto más de pie será necesario flexionar menos para absorber y,
sobretodo, será más sencillo mantener y una posición centrada o, mucho mejor,
al ataque y adelante. En los baches todo ocurre muy rápido, por eso es
necesario concentrarse en cosas simples como ésta y, no olvidar nunca, que hay
que atacar: si vamos a la defensiva nos las darán todas.
Y bueno, el tema es muy extenso
y por hoy no tenemos espacio para más, no obstante, os mando a un link donde
encontrar una ficha sobre los errores más comunes en los baches y sus posibles
soluciones. http://www.esquiarconlospies.com/ficha.htm
(el desplegable no funciona, así que hay que irse abajo para ver la ficha).
¡Buenas huellas!
Carolo © 2002
Página 2: La segunda de baches: amortiguación