Mountain Capital Partners (MCP), una de las empresas con más estaciones de esquí en Norteamérica, da un paso más para crear el mayor dominio esquiable de Sudamérica. Si el año pasado se quedó con Valle Nevado, hace unas horas acaba de confirmar que también ha comprado La Parva. Ambos complejos invernales son vecinas y podrán esquiarse con forfait común.
En total serán ahora algo más de 80 kilómetros de pistas, lo que la deja justo por detrás en tamaño, de Cerro Catedral, la estación de esquí situada en Bariloche (Argentina) y preferida por los turistas extranjeros. Pero este orden podría cambiar si más adelante MCP acaba quedándose también con las pistas de El Colorado - Farellones (que no pasa por una buena situación financiera), el tercer complejo invernal de este dominio esquiable formado por tres empresas independientes. James Coleman, CEO de MCP ha asegurado que
MCP se ha quedado solamente con las pistas y remontes, siguiendo de esta manera la tendencia de este tipo de empresas en Estados Unidos, más interesados en la venta de forfaits, clases, restauración y todo lo que se mueva en el propio complejo invernal, para dejar los desarrollos inmobiliarios en manos de otros.
Y esto mismo es lo que se ha hecho en La Parva. El ya anterior dueño, se queda el hotel a pie de pistas, así como todo el desarrollo inmobiliario. Se quita de encima de esta manera la gestión de la estación de esquí y se centra en la construcción.
El potencial de esta zona es enorme. Hay que tener en cuenta que estas tres estaciones de esquí están a solo 1 hora y cuarto del aeropuerto internacional de Santiago de Chile, la capital del país. Juntas forman un dominio esquiable de algo más de 130 kilómetros de pistas que la situarían como el más grande de Sudamérica.
Sorprendentemente las tres funcionan de manera independiente y apenas han sido capaces nunca de crear un forfait conjunto como sí se hace en Norteamérica o Europa en casos de dominios esquiables pegados unos a los otros.
No obstante para crear este gran dominio esquiable queda absorber a El Colorado-Farellones, que si bien hasta ahora era la estación de esquí más grande gracias a sus 50 kilómetros, ahora se queda como la opción con menos pistas. Además Valle Nevado y La Parva entrarán dentro del Power Pass, que no solo da acceso a 12 estaciones de esquí en los Estados Unidos, sino que estos esquiadores norteamericanos podrán esquiar en Chile gratuitamente en verano.
Con el Power Pass además los menores de 14 años esquían gratis, y los precios suelen ser más competitivos.
Un telecabina desde Santiago de Chile
Uno de los problemas que tienen estas tres estaciones de esquí y que hace años que se viene buscando una solución, es la carretera de acceso. Con hasta 317 curvas y cerrada en cuanto cae nieve, complica la llegada de los esquiadores en las jornadas de powder. Esos días se apostan en los arcenes los llamados 'cadeneros', que son personas que se prestan a ayudar a poner este equipamiento en los neumático, previo pago de una cuota.
Una de las propuestas que se manejan desde hace años es la construcción de un telecabina o teleférico que conecte las afueras de Santiago de Chile con el pie de pistas de estas tres estaciones de esquí. Pero la falta de acuerdo entre las tres empresas que gestionan estos complejos invernales nunca ha logrado concretar nada.
Si El Colorado (que es la estación donde siempre se ha planteado que llegaría este remonte) acaba en manos de MCP, probablemente se pueda desencallar el proyecto. El potencial entonces de esta zona sería enorme, porque tendríamos un dominio esquiable de más de 130 km de pistas con toda una capital de país a sus pies y accesible cómodamente en teleférico o telecabina.
Además las conexiones aéreas son muchísimo mejores para llegar a Santiago de Chile, donde hay vuelos directos desde muchas ciudades de los Estados Unidos y Europa, que a Bariloche, donde hay que hacer escala previamente en Buenos Aires, cambiar de aeropuerto tras un viaje de una hora en taxi y tomar otro avión.
Las tres estaciones de Valle Nevado, La Parva y Colorado/Farellones están pegadas una a la otra pero no unidas comercialmente
