Con la carretera recién abierta, aquello parece un paisaje propio de latitudes mucho más norteñas:
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Por desgracia la previsión se estaba cumpliendo, empezó a llover en la subida al lac d´Oredon, y lo siguió haciendo un buen rato, tuvimos que esperar casi una hora a que parase. Lo bueno de tener tanta nieve es que empezamos a foquear desde el parking, incluso pudimos pasar la presa con los esquíes puestos:
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Y lo que nunca imaginé ni en el mejor de mis sueños, también la brecha de Barris:
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Seguimos con buen ritmo hacia la zona del glaciar, el tiempo se va comportando, no llueve y el sol quiere salir a ratos:
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Al fondo el Tourmalet, con el Pic du Midi tapado por las nubes:
Encaramos la zona del glaciar:
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En la parte final empiezan a entrar nubes, la previsión es que vuelva a llover sobre mediodía, así que vamos hacia la derecha en el collado cimero, para quitar pieles y empezar la bajada:
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La lluvia ha estropeado la calidad de la nieve, está húmeda y pesada, despacito y con buena letra se va dejando hacer. La parte más disfrutona, un tubo ya pasada la brecha, que nos permitió sacar unos cuantos girillos bien enlazados, para llegar nuevamente a la presa con las tablas en los pinreles:
Bajamos justo a tiempo, ya en la bajada cayeron algunas gotas, para empezar nuevamente a llover con ganas según llegamos al coche. Así que a reponer fuerzas, que nos lo hemos ganado:
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Donde nos encontramos estos curiosos cacharros:
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