III
CONCENTRACIÓN FREERIDE. TAVASCÁN 2003. 15 –
16 DE FEBRERO
Cuando oigo hablar de concentraciones, y quizás sea por deformación
profesional, imagino a cientos de moteros enfundados en sus trajes
de cuero o decenas de todo terrenos llenos de
Vista de la estación |
Se comenzaba la noche del viernes, con la recepción de todos los que participábamos en el evento. Llegados desde todos los puntos del país, Aragón, Valle de Arán, Madrid, Barcelona, Sabadell, Asturias…los coches iban llegando a este refugio de madera, escondido entre unos árboles, que sería el cuartel general durante el fin de semana. La cena estaba prevista a las diez de la noche, pero pocos pudimos disfrutar de ella, pues el curro se impone entre semana y la hora de llegada se retrasó bastante.
Albergue Minairons |
Tras las presentaciones oportunas, pequeño refrigerio y recogida del forfait y demás documentación, me instalé en la habitación que compartía con otros participantes y con Marc y Bruno.
A la mañana siguiente, empezó la diversión, había estado nevando y seguía nevando en Baro, pero los teléfonos quemaban con la noticia que en la estación lucía un sol de lujo y el paquete superaba los cuatro metros acumulados de magnífico powder catalán. La estación de Tavascán situada en un valle al pie del cual se encuentra la base de la estación, el refugio de la Pleta del Prat (1750 m.), recibe todas las borrascas que vienen del norte y que descargan sobre sus laderas, proporcionando importantes espesores a lo largo de toda la temporada. Para los que no os hagáis una idea de lo que es una estación de montaña, pensad en la ya mítica La Grave francesa. Así que no hace falta ir tan lejos para encontrar remontadotes mecánicos sin pistas pisadas y muchas hectáreas de montaña, tubos, picos, bosques y demás, por donde campar a tus anchas, en busca del descenso deseado.
Caminando a la cumbre |
Así que con todo el material en el coche, salimos del parking a eso de las ocho y media de la mañana, rumbo norte. Tras cuarenta kilómetros de diversión, muchas curvas y un paisaje precioso, llegaba a un lugar donde se acaba la carretera, sí porque no hay un mega aparcamiento como en otras estaciones, se acaba la carretera y ya está. En ese lugar, me di cuenta que no me había equivocado participando en la concentración. Solo hace falta ver las instantáneas que adornan el artículo para admirar el panorama.
Texto: Manuel Tajada
Fotos: Jordi Gil & Manuel Tajada